Una Red Social genera una conciencia colectiva y una ideología masiva, compartida por cientos o incluso miles de personas que pueden seguir una corriente o tomar un juicio externo como propio. Cuando un político o campaña es juzgada por las redes sociales, se puede tornar en una herramienta extremadamente útil como el caso de la campaña de John Kerry en donde se utilizaron muchas figuras públicas, artistas, y portavoces de la sociedad para llegar a las redes sociales y así conseguir una mejor aceptación.
La influencia de las redes sociales en la política no siempre es positiva; cuando la sociedad comienza a autoalimentarse de opiniones y juicios destructivos, las redes sociales son las encargadas de exagerar y darle importancia a estos sucesos pudiendo destruir la carrera de un político o creando una imagen negativa de un partido o campaña. Un claro ejemplo de esto es la revuelta que ocasionó en las redes sociales digitales el comentario de Paulina Peña Nieto.
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